martes, 27 de septiembre de 2011

28. "I Hope You're Happy Now" - Elvis Costello

Del álbum Blood & Chocolate (1986)

Elvis Costello tiene más de 30 álbumes de estudio. Ha explorado géneros como el Country, Jazz, música clásica, Rock, Folk, Soul. En distintos tiempos colaboró con Paul McCartney, Burt Bacharach y Allen Toussaint. También ha participado en el soundtrack de películas, series de televisión y en homenajes. Y con todo, luego de casi 35 años de carrera, sigue siendo esencialmente un hombre de pubs.

Desde "Alison" hasta su reciente National Ransom, se percibe un aroma a caoba en sus composiciones, ideales para acompañar una Guinness o un Whisky. Jamás fue un héroe de masas, pese a que haya tenido el valor de enfrentar a la multitud del Live Aid solo con su guitarrita tocando un cóver de los Beatles. Porque además, hay que reconocer, el tipo está lleno de agallas. Por eso me simpatiza. Ahí ha estado durante años enfrentando modas y nuevos artistas sin apenas inmutarse, él va a lo suyo, a las canciones trepidantes y melancólicas que atraviesan caparazones.

Y las letras, oh las letras. Cuando colaboraron en Flowers in the Dirt, el disco que levantó la carrera de Paul McCartney luego de varios lanzamientos mediocres, éste mencionó que Costello le fue de gran ayuda porque estaba "lleno de palabras" que completaban las ideas balbuceantes que él tenía. Para mí esto de las letras es vital, incluso me importa más que la música, por extraño que parezca. De ahí que conectara rápido con este hombre que, por si fuera poco, ofrecía melodías de primera.

En México sus discos son difíciles de conseguir. El primero que pude comprar fue Cruel Smile (2002), una obra eminentemente menor en la que se recopilan lados b y descartes de las sesiones de When I Was Cruel. El segundo, un poco mejor, fue The Delivery Man (2004). Siendo sincero me dejaron frío. Con todo y sus aciertos ("Monkey to Man" y "Nothing Clings Like Ivy", por ejemplo) no correspondían a los comentarios halagadores que yo había escuchado sobre su carrera.

Lo empecé a apreciar una vez que tuve contacto con sus trabajos clásicos. Bajar My Aim Is True y This Year's Model fue clave, episodios dorados de mi adolescencia. A partir de ahí el resto vino por inercia. Fui cayendo en las redes de su voz rasposa y cinismo lírico. Me di cuenta que era de los míos, un tipo visceral y a la vez pensante, dependiendo de cómo lo agarrara el instante.

En la etapa media sacó Blood & Chocolate, un disco que, aunque irregular, contiene los que tal vez sean mis dos temas favoritos de su repertorio. Me refiero a "I Want You" y a "I Hope You're Happy Now". Estuve a punto de poner "I Want You" en esta lista, de hecho era la idea original, al final la descarté porque esto ya estaba siendo demasiado azotado, y elegir esa canción en específico hubiera derivado en una escrito lleno de sangre y tripas. Tendrán que imaginar lo que pudo ser el post más dramático en la historia de este blog. De cualquier forma me encanta, porque en ella Elvis se hunde contigo en esos ratos de revés amoroso. Cualquier hombre adolorido la debe escuchar para saber que en la industria musical existe alguien capaz de expresarse de una manera tan cercana que casi lo sientes como tuyo. Si ves la letra, te das cuenta que va sin ninguna floritura, empezando con una tonada de folk donde declara su amor a una chica para luego de un guitarrazo dar paso a una serie de reproches. Se queja de manera amarga, reclama que se haya alejado y haya sido lo suficientemente tonta como para relacionarse con otro, y le amenaza y le advierte. De igual forma la ofende y se burla. Pero detrás de cada línea repite una y otra vez que a pesar de todo, la desea (I want you); porque así es, solo cuando existe un sentimiento fuerte, son posibles ese tipo de decepciones, y la mayoría de las veces no se excluyen, sino que conviven, o, mejor dicho, pelean dentro de la cabeza de las víctimas.

Chicas, les recomiendo nunca abandonar a Elvis Costello. Es un pésimo ex. Tiene la pluma afilada para desgañitar relaciones enteras. Y en este álbum en específico se da más que nunca. Lo compuso luego de la separación con Mary Burgoyne. La primera en ser grabada fue "I Hope You're Happy Now" un título irónico como suelen ser los "buenos deseos" que se lanzan en temporadas de crisis. Similar al "Ojalá que te vaya bonito" de José Alfredo, en donde detrás de las palabras bondadosas, se esconde el deseo íntimo del regreso.

Así, en esta canción, Elvis le desea a su antigua esposa una "vida feliz" con su nueva pareja, un hombre que parece comida congelada y que por ello su amor durará por siempre. Alguien que tiene lo que ella necesita y mucho que de lo que no, y uno que actúa como inocente a pesar de tener las mismas sucias intenciones que todos piensan. Finaliza diciendo que esto le dolerá eventualmente más a ella, y que de cualquier forma, nunca la amó.

Pero le compone canciones y le obsesiona. Les digo, un tipo contradictorio, al que entiendo muchísimo.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Creo que Elvis me agrada por las mismas razones que a ti. Sin embargo I Want You la prefiero en la versión de Fiona Apple, tal vez por que soy una chica