viernes, 16 de abril de 2010

John y Paul


Paul McCartney como músico le da mil vueltas a John Lennon. Fácil. Recuerdo una entrevista (tal vez de la Antología, no recuerdo) en la que Paul relata cómo le es posible tocar cualquier instrumento que le pongan enfrente. Aunque sea uno desconocido para él, sólo le bastan 15 minutos para encontrarle el modo y las notas. Es un virtuoso en ese aspecto, no por nada, bien que mal tiene cuatro discos de música clásica en su curriculum. Tiene tanto control, experiencia y facilidad para la composición, que incluso sus peores álbumes (pienso en Press to Play y McCartney II) son decentes. Vamos, es alguien que, por mero oficio cada que se pone enfrente de su instrumento, saca algo que está encima del promedio. Un dotado.

John Lennon en cambio, era limitadísimo musicalmente. A duras penas podía tocar la guitarra y el piano. No digo que fuera una basura, tocar desde temprana le ayudó a ser cumplidor. Aun así, al compararlo con cualquier estrella de rock, nos damos cuenta de que es más bien flojo en ese aspecto. Sin embargo poco importa porque hay algo en él que no se puede encontrar en McCartney ni en nadie. John era alguien auténtico, al escuchar (o leer) sus letras te dabas cuenta de inmediato. Podías estar en desacuerdo con su discurso, pero se le tenía que reconocer la sinceridad con la que lo plasmaba. Era un personaje estelar y cercano a la vez, de ahí que sea tan adorado. Es increíble que después de tantos años nos podamos identificar plenamente con un loco oriundo de Liverpool. A veces se mitifica a las estrellas de rock, cuando lo cierto es que no son muy diferentes a nosotros los simples mortales que vamos a super en busca de ofertas. La fama y el dinero no quitan que tengan los mismos problemas amorosos, personales y existenciales.

Algo que le ayudó hasta el último momento de su vida fue su poco pudor. John se desnudó literalmente o simbólicamente durante toda su trayectoria musical. Aun sabiendo que tenía un público de miles, jamás tuvo empacho en dar a conocer su mundo interno. Volviendo a una odiosa comparación, basta con repasar las canciones de este dúo para darse cuenta de sus personalidades opuesta y complementarias. Paul te platicaba de la soledad de Eleonor Rigby pero no de la propia, John en cambio era el protagonista central de sus temas. Tal vez por eso era más contradictorio, como somos a fin de cuentas todos los seres humanos. Igual como se llamaba a sí mismo perdedor luego se consideraba un héroe. Tampoco tenía reparo respecto a lo familiar, lo cual se ejemplifica a la perfección en Plastic Ono Band donde plasma el abandono de su padre y la muerte de su madre de manera desgarradora en Mother y My Mummy's Dead.

No es que Paul siempre fuera superficial, lo que pasa es que se escondía detrás de personajes y motivos neutrales para desahogarse. Si su compañero era la primera persona, él era la tercera. Había excepciones, claro, ahí está por ejemplo, I'm Down; lo que pasa es que la vitalidad de su interpretación hace que la letra parezca más bien un pretexto para mantener una versatilidad temática que una declaración de sinceridad.

Como sea, ambos, a su modo, fueron extraordinarios. Tanto juntos como por separado lograron tocar fibras sensibles de una manera tan sencilla que se ganaron el cariño de millones.

Todo esto es porque hay, dos cancioncitas muy especiales para mí en estos momentos, que quería compartir. Maldito John sólo él podía saber cómo me siento y ya está muerto, joé.



3 comentarios:

Zorrooo dijo...

Gran aporte.
Ese choque también me lo habían contado. Que curioso, tan similares y tan diferentes a la vez.

http://puercatumadre.blogspot.com/

Saludos bro

Pixie dijo...

claro!!!! bueno Bigmaud, hay mucho material de los Beatles dónde incluso las canciones de los menos populares pueden describir tu sentir de manera casí exacta.

y es por eso que siempre que ando deprimida Hey Jude me hace sonreir y con ganas :D

Saluditos!!

Bigmaud dijo...

Creativicosas: Una combinación suprema, eso eran.

Picsi: El catálogo Beatle está repleto de gemas a la espera de ser descubiertas. Las más famosas sólo son una nuestra de todo el genio que hay detrás.


Saludos.ss