viernes, 8 de julio de 2011

Sweet Laura

Hace tiempo descubrí el parecido que había entre una de mis canciones favoritas de Girls y un viejo clásico de Neil Diamond. Me refiero a "Laura" y "Sweet Caroline" respectivamente. Entre ambas hay, casi con precisión, 40 años de diferencia. Neil lanzó la suya como sencillo el 16 de Septiembre de 1969 y la otra venía dentro del disco debut de la banda de San Francisco titulado Album, lanzado el 22 de Septiembre de 2009.

Las similitud se distingue fácilmente desde el comienzo. A "Sweet Caroline" le basta apoyarse en la voz de Neil Diamond, la de Girls requiere de una guitarra protagónica y la batería que sustituye el intro de teclado de la, digamos, original. No obstante, en esencia van por el mismo camino. De hecho las primeras líneas dicen algo semejante, aunque exista una variante en el uso de las palabras (Where it began? vs. Where did it start?). En el resto de la letra empiezan las diferencias, van en ánimos completamente opuestos. Una es optimista respecto al hallazgo de un nuevo amor que hace ver la vida con otros ojos; la otra, va de una ruptura: el protagonista mira atrás intentando descifrar el instante en el que una relación promisoria se fue al carajo. E intenta arreglarlo, aun a sabiendas de que es imposible.

Eso último hace que me incline hacia "Laura" que, pese a ser una obra derivada, tiene un aire dolido que renueva la melodía por completo. La siento real, nostálgica e identificable (¿quién no se ha sentido alguna vez así?). Esto ejemplifica cómo una letra puede disfrazar cualquier parecido. No se debe olvidar que "Sweet Caroline" fue un hit masivo fácilmente reconocible por cualquier estadounidense, suficiente para que lo señalamientos hacia Girls hubieran aparecido desde su nacimiento, algo que jamás sucedió.

Escribo este post porque ayer, al buscar por internet a alguien que confirmara lo que cuento arriba, me sorprendí al no encontrar ninguna referencia que confirmara lo que incluso llegué a temer fuera una alucinación mía. Hasta que ahí, en medio de miles de resultados, hallé el siguiente video:


Con apenas 140 reproducciones, un joven norteamericano respaldó mi teoría. Cuando lo vi, me causó gracia el que contara que —justo como yo— había googleado sin encontrar a nadie más que pensara lo mismo. De repente me puse a pensar en uno de los tantos males del siglo XXI: la distancia. Quiero decir, ésta siempre ha existido, pero internet nos ha hecho conscientes, más que nunca, de lo que no podemos tener por estar donde estamos. De cuántas personas nos perdemos físicamente por tener la desgracia de tener un código postal distinto. Él y yo podríamos ser amigos: coincidimos en aficiones y parece un chico agradable. Nunca lo seremos debido a que no hay manera en que podamos aproximarnos. No es culpa del idioma, igual pasa con las personas que comparten nuestra lengua con las que, de cierto modo, llegas a convivir a través de redes sociales; esas que te hacen preguntarte, ¿por qué diablos están lejos si humanamente somos tan cercanos? De inmediato te das cuenta de que en su lugar, como diría aquella otra canción, le entregas tu valioso tiempo a personas que, en general, les importa poco si estás vivo o muerto.

Hay que aprender a vivir con la idea de que podría ser diferente, asimilar que el mundo es injusto y que hay que arreglárselas con lo que esté a la mano, que muchas veces no está mal. Sería una memez cerrarse a lo que es diferente a nosotros, hay amigos y amores potenciales en cualquier rincón.

En una parte de su mensaje, el muchacho dice que no encontró a nadie que blogueara acerca de esos dos temas. Bueno, aquí estoy, espero compensar, luego de dos años, el vacío que te llevó a grabar y subir el video. Lamento que jamás vayas a leer esto, y que resulte tan inútil dirigirme a ti. Simplemente quise tomarme unos minutos para recordar, que lejos de aquí, hay gente con la que comparto gustos y aficiones.

2 comentarios:

Bedeckt. dijo...

Vaya, no creí que fuera cierto, pero si, esas dos canciones tienen más parecido del que en un principio les asocie.
El otro tema del que escribiste, bueno, es un poco trite saber que hay personas tan parecidas a ti, y a las que probablemente nunca conozcas fisicamente por la distancia que los separa, pero como dices, uno tiene que vivir con eso, sabiendo que la vida es tan justa como un policia mexicano.

Acid Trip dijo...

"De inmediato te das cuenta de que en su lugar, como diría aquella otra canción, le entregas tu valioso tiempo a personas que, en general, les importa poco si estás vivo o muerto".

The Smiths...Por eso me gustan.